Hemisferio sur

Aunque esta vez no ha sido en tandem, si ha sido el amor el que nos lleva a una nueva aventura. Por primera vez cruzamos el ecuador y ya estamos en el hemisferio sur, todavia no hemos tenido tiempo para ver como el agua gira al reves en el lavabo, pero lo haremos.

La nueva aventura esta vez es Indonesia, en donde visitaremos varias islas y sobre todo nuevas culturas. Tras 4 vuelos y más de 48 horas llegamos a nuestro nuevo destino, Yogyakarta en plena isla de Java, que llegasemos nosotros no  era muy dificil, pero lo que si lo hicieron fueron nuestras maletas, vaya momento en el que mientras paseabamos por las cintas de equipaje para cambiar de terminal estaba alli dando vueltas, es probable que al final hubiesen aparecido, ya que el sistema que tienen no es muy moderno ni eficiente pero si eficaz, 20 indonesios en cada puesto de trabajo, asi que alguno se habria dado cuenta y las cargaría en el nuevo avion.

La primera excursion fue la visita de varios e importantes templos cercanos a la ciudad, uno induista que no me acuerdo y aunque me acuerde tampoco lo voy a saber escribir, y el otro uno de los templos que estuvo dentro de las 7 maravillas del mundo, el templo budista burubudur, que no tiene nada que ver con el barabara berebere.

Por lo que nos dijo el guia, porque tampoco hemos tenido mucho tiempo para informarnos, es del siglo VIII, y debio estar varios siglos cubierto por las cenizas. No es gigante pero es una pasada, todas las paredes que tiene talladas y está todo la vida de Buda esculpida, aparte de más de 500 budas distribuidos. Estan locos estos budistas.

Respecto a la ciudad, pues aparte de ver el palacio del Sultan, tampoco hemos parado mucho, entre que estamos aprovechando a descansar dentro de un Melia, y recuperandonos del Jetlag, lo unico que hemos hecho es circular en vehiculo. Se ve una ciudad, gigante, nada hostil, respetuoso con todo y todos, que viven millones y millones de personas, pese al caos esta todo limpio, arreglado, y la scooter se utiliza para todo.

La comida, pues no se decir si esta buena o no, pero al menos hay muuuuuchaaaa me daba la impresion que me iba a convertir en Songoku.

Ahi van un par de foticos. y nos quedamos disfrutando del  Melia,